Bastante más redondo, más relajado y más divertido que el primer disco, en el segundo álbum de Iván & Los Terribles se agregaron dos integrantes: Marcelo Alfaro en bajo (si, una banda con dos bajos) y Pol Villasuso en sintetizadores. La parte de 2 bajos estuvo muy bien resuelta, Marcelo cubriendo la parte ‘grave’ del bajo, liberando a Iván de tocar acordes y mugre en el registro agudo del instrumento. 

Lo grabamos de la misma forma que el disco anterior en la misma casa, aunque yo viviendo ya en Argentina, mezclandolo remotamente y ajustando detalles varios. 

Iván encaró la parte vocal de una forma mucho más íntima y susurrada que quedó muy cool y funciona excelentemente con el resto de timbres del disco. Si recuerdo bien, grabó casi todas las tomas con un Sennheiser MD441 (¡Buenas noches Ameriiicaa!). 

Re-escuchando los dos discos de Iván llego a la conclusión de que, cuando se va del perfil rockero muy efectivo, logra una sonoridad muy, muy rara, gracias a la magia de carecer de la guitarra y de apoyarse tanto en los teclados. Realmente no conozco ninguna otra banda que suene igual y maneje la misma paleta de colores. 

Como dato nerd: Este es el único disco en el cual hice el MIDI OUT de Logic, mandando algunas lineas MIDI a un Korg MS20 Mini que tuve durante un breve tiempo. Lo usé en un montón de temas. 

 

Canción preferida: Fiebre en Calbuco